Los jóvenes estudiantes trabajan en la limpieza de las calles y desagües en Nakururu, imprimiendo valores sociales tan necesarios en este mundo. Crece y se desarrolla la comunidad en torno al Colegio St. Francis, convertido ya en motor de desarrollo de la comarca.
La escuela de secundaria St. Francis fue fundada en 1987 por la misión franciscana en Subukia, con el fin de ofrecer acceso a la educación secundaria a los jóvenes más necesitados y que ello redundara en un mayor desarrollo de la zona. Especialmente se trataba de promover la educación de las niñas, que sufren mayores índices de abandono escolar en las áreas rurales.
En 2012 se acometieron trabajos de renovación de las instalaciones, muy deterioradas por las condiciones climáticas de Subukia. La OFS de España colaboró en este proyecto financiando la rehabilitación de los dormitorios de los jóvenes.
Hoy el colegio tiene capacidad para 450 estudiantes y se ha logrado reducir drásticamente la desigualdad entre niños y niñas asistentes. La formación en valores y solidaridad con su comunidad da sus frutos: titulados y alumnos de la escuela realizan trabajos para la mejora de su entorno, como la limpieza de las calles y desagües, entre otros.